Con la llegada de la primavera, nos llega una abundancia de vegetales verdes y hierbas frescas que nos permite crear las ensaladas más hermosas que nuestra mente pueda imaginar. Después de los estofados del invierno, todo lo que provoca es una ensalada ligera y verde. Además, esta ensalada verde de primavera está llena de color y alegría, se adereza con una vinagreta muy sencilla y puedes cambiar ingredientes a tu gusto para darle tu toque personal.
Notas sobre los ingredientes
Hierbas frescas y flores comestibles
Una manera sencilla de añadir un toque especial a tus ensaladas de primavera es incluir hierbas frescas y flores comestibles, disponibles en abundancia durante esta época del año. Para esta ensalada, he usado menta, albahaca y cebollino, las cuales he mezclado con la rúcula para formar la base de esta ensalada verde. También he añadido flores comestibles que le dan un toque de color muy atractivo.
Habas y guisantes tiernos (arveja china)
Estos dos ingredientes son probablemente los que requieren más preparación en esta receta, especialmente si compras las habas frescas en sus vainas, lo cual requiere algo de trabajo.
- Para los guisantes tiernos: Empieza retirando los dos extremos del guisante. A veces, en este proceso podrás remover un hilo duro en ambos costados de la vaina; no todos los guisantes lo tienen, usualmente solo aquellos que han sido cosechados muy tarde. Para probarlos, simplemente cómete uno; si está fibroso, necesitas retirarle ese hilo.
- Las habas: Voy a empezar por decir que si puedes conseguir habas congeladas o ya peladas, te vas a ahorrar un montón de trabajo. Pero si no, vas a requerir un poco de esfuerzo. Primero, debes sacarlas de la vaina. Una vez que las tengas peladas, pásalas por agua hirviendo por unos 30-40 segundos e inmediatamente mételas en agua helada. Este proceso se llama blanquear. Una vez que estén frías, retira la película blanca que cubre las habas. Te muestro de qué hablo en la siguiente foto.
- La vinagreta de esta ensalada es muy sencilla. hecha con tres partes de aceite y una de vinagre de vino blanco, sal, pimienta, miel y mostaza.
- Por último, añade pistachos tostados ligeramente en una sartén, pero siéntete libre de usar cualquier fruto seco que tengas a tu alcance o simplemente omítelos.
Esta ensalada verde de primavera es perfecta como acompañamiento de tus proteínas favoritas; también puedes añadir quesos para una entrada más fuerte.