Este pollo chino salteado con bok choy es una de esas recetas que son súper fáciles de preparar. Puedes tener el almuerzo/cena en cuestión de minutos. Sin ninguna complicación, mas que disfrutar de este delicioso platillo. Además requiere de pocos ingredientes y puedes sustituir alguno de ellos.
La primera vez que preparé esta receta fue hace 2 años mas o menos, la he aprendido en un libro de Danielle Capalino, especialista en salud y nutrición pública. Desde entonces la receta he cambiado la receta un poco, adaptándolas a nuestros gustos y necesidades.
Esta receta tiene un perfil de sabores asiáticos, está preparado con jengibre, miel, tamari (salsa de soja o aminos), aceite de sésamo y vinagre de arroz. Estos ingredientes son la marinada del pollo y luego el bok choy.
El bok choy o repollo chino
Si no has probado el bok choy quizás esta receta te anime. este es un vegetal cuya estructura me recuerda al céleri. La col china o bok choy está compuesta por 90% agua, al mismo tiempo contienen un 2% de carbohidratos y un 1% grasas.
Adicionalmente, contiene vitamina A, C, KB6 y folato. Con un aporte de sólo 13 calorías por un total de 100gr. Lo que lo hace un excelente alimento perfecto para añadir a tu dieta. Sin embargo su consumo debe ser moderado, ya que contiene glucosinolatos, que en grandes cantidades es tóxico para humanos.
¿Por qué preparar esta receta?
Una de las ventajas de este platillo, y de las que mas me gusta, es que al ser salteado puedes cocinarlo todo en una misma sartén o wok, eso significa que tendrás pocas ollas que lavar. Ademas, es de cocción muy rápida. Y bueno, eso lo hace perfecto para esos días en que necesitas poner comida en la mesa en poco tiempo.
Puedes usar sustitutos para el bok choy, Como por ejemplo el repollo, este tiene un tiempo de cocción similar al bok choy. otra alternativa es el brócoli, en este caso, debes hervir previamente el coliflor hasta que esté casi listo digamos un 75% y terminar la cocción como indica la receta.