Tarta de espárragos y ricotta

Esta tarta de espárragos y ricotta es un platillo que no solo es visualmente atractivo, sino que también es una delicia para el paladar. Es perfecta para servir como aperitivo, acompañamiento o incluso como plato principal, acompañada de ensalada verde y alguna proteína. Los espárragos, ricos en nutrientes y fibra, junto con la suave y cremosa ricotta, crean una combinación deliciosa que será bien recibida en cualquier mesa. Esta tarta es una opción ideal para aquellos que buscan experimentar con los sabores frescos y saludables que ofrece la temporada de primavera.

Cómo preparar esta tarta de espárragos

La preparación de esta tarta es sencilla y rápida. Comienza con una base de masa quebrada, que puedes hacer en casa o comprar prehecha en el supermercado. Una vez que la masa esté lista, extiéndela en una bandeja para horno y prepara el relleno. Mezcla la ricotta con huevos, sal y pimienta, y viértela sobre la base. Coloca los espárragos sobre la crema de ricotta y hornea hasta que esté dorada y firme. El resultado es una tarta que no solo impresiona a la vista, sino que también deleita con su sabor fresco. Esta misma idea puedes replicarla con otros ingredientes, como por ejemplo en esta tarta de tomates, que es perfecta para el verano.

Una de las mejores cosas de esta tarta es su versatilidad. Puedes disfrutarla caliente, a temperatura ambiente o incluso fría. ¡Y es perfecta para un picnic! Además, puedes variar los ingredientes: añade hierbas frescas como albahaca o perejil, o incluso incorpora otros vegetales como pimientos o espinacas. También puedes experimentar con diferentes tipos de queso; el queso de cabra es una buena opción en esta preparación. Esta combinación no solo realza los sabores, sino que también hace que el platillo sea aún más nutritivo.

Finalmente, la tarta de espárragos y ricotta es el tipo de receta que se convierte en un clásico en cualquier hogar. Con su equilibrio entre textura y sabor, es una forma perfecta de disfrutar de la primavera y de los productos frescos de la temporada. No dudes en probarla en tu próxima reunión familiar o como una deliciosa cena entre semana; ¡seguro que te encantará!

Tarta de espárragos y ricotta

Receta de Mary

Esta tarta de espárragos y ricotta es un delicioso platillo que combina una base de masa quebrada con un relleno cremoso de ricotta. Perfecta para almuerzos ligeros o cenas especiales, su preparación es rápida y sencilla. Atrévete a enriquecerla con hierbas frescas o vegetales para un toque extra de sabor. ¡Sin duda, se convertirá en un clásico en tu cocina!

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Porciones

6

porciones

Tiempo de preparación

20

minutos

Tiempo de horneado

30

minutos

Ingredientes

• Para el relleno

• 1/2 taza de queso ricotta a temperatura ambiente

• 1 huevo grande

• 1 diente de ajo grande, cortado o rallado finamente

• 1 cucharada de menta fresca cortada a grosso modo

• La ralladura de un limón (el jugo se usará para servir)

• Sal y pimienta al gusto

• Nuez moscada al gusto

• 1/2 taza de crema fresca (crème fraîche) a temperatura ambiente

• Para la tarta

• 1 masa de hojaldre (masa quebrada)

• 1 manojo de espárragos, limpios y cortados a la mitad (si son muy gruesos)

• Aceite de oliva

• Sal y pimienta al gusto

• Queso parmesano rallado

• Para servir

• Huevos cocidos (1 por porción)

• 2 tazas de rúgula

• Jugo de un limón

• 1 cucharada de aceite de oliva

• Sal y pimienta al gusto

• Flores comestibles (opcional)

Modo de preparación

• Precalienta el horno a 425 °F (aproximadamente 220 °C). En un tazón mediano, mezcla el queso ricotta, el huevo, el ajo, la menta, la ralladura de limón, la sal, la pimienta y la nuez moscada hasta obtener una mezcla homogénea. Añade la crema fresca (crème fraîche) y mezcla hasta incorporar.
• Transfiere la masa a una bandeja para hornear forrada con papel pergamino. Con un cuchillo afilado, marca ligeramente un borde de ½ pulgada (1.27 cm) alrededor de los bordes de la masa de hojaldre.
• Esparce la mezcla de ricotta de manera uniforme dentro del borde marcado. Coloca los espárragos encima y rocíalos con aceite de oliva, sal, pimienta y queso parmesano rallado.
• Hornea hasta que la masa esté inflada y dorada, de 25 a 30 minutos. Déjala enfriar en la bandeja durante al menos 15 minutos o hasta 4 horas antes de servir. Corta en cuadrados; en total rinde 6-8 porciones.
• Para servir
• Adereza la rúgula con un poco de jugo de limón, aceite de oliva, sal y pimienta al gusto.
• Sirve las tartas con la ensalada de rúgula, un huevo cocido, aceite de oliva, sal, pimienta, más hojas de menta y flores comestibles (opcional). ¡Buen provecho!